Opinión
No se mete pero asciende a sus amigos

Recordemos que las Fuerzas Armadas juegan un papel importante en las elecciones democráticas.
El presidente Ollanta Humala todavía no convoca a elecciones generales, pero ya está hablando de ellas cuando anuncia que no se meterá en los comicios de abril del 2006. ¿Le podemos creer?
En los últimos días hemos visto cómo ha ido favoreciendo a la promoción Héroes de Pucará y Marcavalle (1984) —de la cual forma parte— en los ascensos, relegando a oficiales con trayectoria intachable y recortando vacantes a otras armas del Ejército peruano.
Lo importante ahora es recordar que las Fuerzas Armadas juegan un papel fundamental en una elección democrática, pues se encargan de custodiar el traslado de las ánforas, el material electoral y los locales de votación. Y no olvidemos, además, que los militares ejercen el derecho a voto.
Humala demuestra estar consciente de lo que implica el ascenso de sus amigos; por algo ha salido a decir que no se meterá en la campaña, que no se pronunciará sobre lo que hablen o dejen de hablar los candidatos y que su alta investidura no se lo permite. Ha dicho también desconocer cambios en el equipo de procuradores encargado del caso de las agendas que supuestamente le pertenecerían a Nadine Heredia. Al respecto, Humala aseguró que su gobierno es respetuoso de la independencia de poderes.
Habrá que ver qué pasa con los procuradores y eso nos dará una idea de lo que pasará en la campaña electoral. Lamentablemente, el mandatario no goza de credibilidad.
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